
¡Saludos, queridos lectores!
Os escribo desde Belfast. Si pensáis que hace frío en España, tenéis que pasar unos días por aquí.
Quería acabar este año pensando en el nuevo año que está a punto de nacer. Simplemente quiero dejaros con diez consejos evangélicos sobre cosas que tienes que hacer –sí o sí- en los siguientes doce meses.
1.- Sé testigo
Acuérdate de que tu misión en este año nuevo es la de ser testigo de Cristo. Tu existencia terrenal trata de mucho más que ganar pasta, comprar un coche chulo e ir de vacaciones una vez al año. ¡Tu vida trata de Cristo! Así que: sé un reflejo de Él en todo cuanto hagas. Testifica del Señor dondequiera que vayas.
2.- Busca a Dios
No hay nada más importante que la búsqueda del Señor. No podrás ser eficaz a la hora de testificar acerca de Él si no estás inmerso en su presencia. Sé diligente en los medios de la gracia, esto es, el estudio de la Palabra, la oración y una vida de compromiso con tu congregación local. Dile al Señor: “Padre, este año, te quiero a ti”.
3.- Lee buenos libros
El Señor te ha dotado de un cerebro. Te llama a glorificarle con toda tu mente. ¡No seas un vago intelectual! Sumérgete en buenos libros. Aquí tienes diez recomendaciones para empezar.
4.- Bendice a alguien
Aprovecha cualquier oportunidad para hacer un bien inesperado a alguien. Busca excusas para ayudar a la gente. Compra bombones, regala champú, invita a alguien a tomar un cafecito (¡vamos, usa tu imaginación!). Haz lo que sea para que los demás sean bendecidos por medio de ti.
5.- Sonríe
Por fa, te suplico, te ruego y te pido en el nombre del año que viene que sonrías para la gloria de Dios. ¿Qué podría ser peor que ver a un creyente con la cara más larga que un caballo deprimido? ¡Salta con gozo! ¡Canta cánticos espirituales cuando estás en la iglesia, en el curro, en Mercadona y en la ducha! Qué las personas sepan que los evangélicos no somos unos amargados.
6.- Da una vuelta
Da una vuelta, es decir, haz ejercicio físico. Mantén tu cuerpo en orden. Dios te ha regalado un cuerpo con el fin de que lo cuides como buen administrador. Come bien. Bebe bien. Haz algo de deporte. Hará maravillas en tu vida. No te cansarás tanto.
7.- Mira a la gente a los ojos
Como tantas personas andan atadas por el móvil, el portátil, el i-Pad y WhatsApp, resulta casi imposible tener una buena charla con alguien hoy día. ¿Cuándo fue la última vez que te desconectaste de las redes para mirarle a tu mujer (marido) a los ojos y pasar una horita juntos hablando y prestando atención el uno al otro?
8.- Perdona, perdona, perdona…
No empieces el nuevo año sin haber perdonado a todas las personas que te han hecho daño a lo largo del año pasado. No guardes rencor en tu corazón contra nadie. No permitas que la amargura te destruya. No podrás estar plenamente satisfecho en Dios si sigues con odio en tu interior.
9.- Descansa
Consejo número 9 es: ¡descansa! Con el ritmo tan estresante de la vida cotidiana, recuerda que Dios estableció el día de reposo para que el hombre descansara.
Ser protestante significa tener una buena ética del trabajo –claro que sí- pero si estás trabajando siete días de la semana a topé sin parar, estás en pecado. Tu cuerpo necesita reposar. Tu alma también. No descansar equivale a desobedecer a tu Creador.
10.- …
El último lo dejo libre para que rellenes tú el hueco. Piensa en algo guay que podrías hacer este año para la gloria de Dios. ¡Decide tú!
¡Feliz y bendecido año nuevo para todos!
Soli Deo gloria
Excelente artículo Pr. Will.
El punto 10 lo utilizaré para tener un plan de lectura de la Biblia durante todo el año. Si UD cuenta con uno, le agradecería me lo pueda compartir.
Un abrazo en Cristo