
También fue dicho: Cualquiera que repudie a su mujer, dele carta de divorcio. Pero yo os digo que el que repudia a su mujer, a no ser por causa de fornicación, hace que ella adultere; y el que se casa con la repudiada, comete adulterio (Mateo 5:31-32, primera parte).
Gracias, Padre.
Es lógico que tu Hijo hable sobre el divorcio en el contexto del adulterio (vv. 27-30).
Me impacta el gran valor que concede al pacto matrimonial, reflejando lo que tú habías dicho por medio de tu siervo Malaquías: “El Señor Dios de Israel ha dicho que Él aborrece el repudio” (Malaquías 2:16). ¡Detestas el divorcio con todo tu corazón!
Qué diferentes son los fariseos. Por un lado, les encanta invertir toda su energía en debates huecos sobre los elementos externos y públicos de la religión (dar limosna, orar y ayunar). De esta manera, dan una gran apariencia de santidad. Pero por el otro lado, les da absolutamente igual la naturaleza sagrada de la unión matrimonial.
Amado Padre: líbrame de la hipocresía religiosa. Dame más pasión por el vínculo matrimonial que por los ritos religiosos. Enséñame a amar lo que tú amas y a repudiar lo que tú repudias.
Pastor Will Graham – Palabra de Vida Almería

Pastor buenas tardes , y si cuando te divorciaste cuando no sabía en profundidad lo que Dios ama y lo que el aborrece como es el caso del divorcio, que hacer?
Yo me volví a casar ,entonces por lo que entiendo es que el que ahora es mi esposo esta adulterando conmigo ?
Es un tema que me trae mucha angustia ,muchas veces no puedo disfrutar de la unión que tengo con el y me digo haberlo visto antes como ahora lo veo tan claro esto del divorcio y de segundos matrimonios.
La paz del Señor.
Hace ocho años mi esposa me abandonó ante problemas económicos que tuvimos. Después de 19 años de matrimonio. No hubo causa de adulterio de ninguno de los dos para esta separación, sino la influencia de su familia y en especial de mi suegra, la cual quería que se fuera a vivir con ella porque había quedado viuda. Todo eso se sumó y ella tomo la decisión de dejarme. Como yo había conocido al Señor, por consejo de mi pastor me dijo que si me divorciaba y me volvía a casar cometería adulterio. Gracias a Dios siempre he tenido el apoyo afectivo de mis tres hijos, y le he pedido al Señor que me ayude a permanecer casto hasta su venida o hasta que me llame a su presencia. Pues personalmente se que en el NT no hay validez para que un divorciado o separado se vuelva a casar. En 1 Corintios 7:10-11, el mismo prohíbe que los casados se vuelvan a casar. Y, si hay separación (como en mi caso) se debe de quedar solo. Muchos dicen que quedarse solo es difícil de soportar, pero si un cristiano pone su mirada en Cristo, en las cosas celestiales (Colosenses 3:2; Hebreos 12:2), analizará que los pocos años en esta vida, en la cual el Señor dijo que tendríamos aflicción (Juan 16:33), no se pueden comparar con una gloriosa eternidad junto al Señor (Juan 14:1-2). Le dejo estos dos textos maravillosos para que medite en ellos: Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás. Porque de esta manera os será otorgada amplia y generosa entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo (2 Pedro 1:10-11).