
Como también nosotros perdonamos a nuestros deudores (Mateo 6:12)
Padre nuestro:
No me cuesta pedirte perdón. Pero sí me cuesta perdonar a mis deudores, sobre todo si son mis hermanos en la fe.
Cuando un hermano peca contra mí, ¿por qué de repente se me van las ganas de congregarme? La respuesta es muy sencilla: narcisismo. El problema es que estoy locamente enamorado de mí mismo.
Mi amor propio predica un evangelio satánico que dice que nadie es quien para meterse conmigo porque soy el señorito perfecto. ¡Qué corazón más negro y perverso el mío! ¡Es un mundo de veneno infernal!
Oh Padre: si fuera perfecto, imitaría los pasos del Santo Ser a quien tú enviaste, el cual oró en el Calvario: “Perdónalos porque no saben lo que hacen” (Lucas 23:43). ¿Cómo voy a albergar amargura y odio en mi corazón contra mis hermanos por ofensas leves si tu Hijo pidió que perdonaras a sus torturadores?
Al fin y al cabo, ¿no merezco sufrir? ¿Es injusto que una persona tan vil como yo padezca? Desde luego que no. Todo lo que no sea el infierno para mí es pura misericordia.
Perdóname por ser tan egocéntrico. Ayúdame a perdonar a mis deudores.
Pastor Will Graham – Palabra de Vida Almería
Así es, nos cuesta perdonar, e incluso a las personas más sercanas. Pero, el perdón, no se basa en nuestros sentimientos, es, una decisión, púes el PADRE, puso a su HIJO es la cruz y cargo todos nuestros pecados a EL y decidió perdonarnos sin merecerlo. Nos dio, gracia sobre gracia, bendiciones. Gracias por el devocional pastor🙏
Sí, perdonamos porque hemos sido perdonados. Así funciona la lógica cristiana. ¡Bendito sea el Señor por su precioso perdón! ¡Aleluya! WG
Pastor, le di a un enlace equivocado y me sale que no me enviaran más correo, porfa, no deje de envíamelo!!@
como no soy de España para tenerte de frente y disculparme lo hago por acá, sentí de parte de Dios que tenia que disculparme con vos porque era molesto como una espina, hace unos meses no estaba bien espiritualmente y me desperté enojado con el enemigo en mente, y te agredí en Facebook dije que a veces ustedes los pastores escriben reflexiones estúpidas, bueno esta disculpa es de corazón y de verdad te pido perdón pastor por haberte comentado eso, tus predicas me son de bendición siempre.